Con los años y como resultado de un proceso natural, la piel pierde su aspecto liso, terso y juvenil favoreciendo la aparición de signos de flacidez y arrugas. Igualmente, el tejido adiposo se reduce y produce como resultado visible un adelgazamiento del rostro.
La infiltración de los distintos rellenos sintéticos reabsorbibles, que se encuentran aprobados por la Agencia Europea del Medicamento, consigue alisar las arrugas, y con ello, proporcionar un efecto de rejuvenecedor.
Entre las propiedades de estos rellenos sintéticos reabsorbibles cabe destacar que son biocompatibles y biodegradables, es decir, desaparecen paulatinamente por acción de los macrófagos de la piel.